Con la Renta Dignidad, el piso de protección social para los adultos mayores es una realidad. Pese a que tiene el PIB per cápita más bajo del continente, Bolivia ha alcanzado una de las tasas de cobertura más altas de pensiones de vejez. Con la introducción de la pensión no contributiva Renta Dignidad en 2007, Bolivia redujo las brechas y logró la cobertura universal.